domingo, 27 de julio de 2008

Fideuá cutre

Recuerdo llegar a mi casa y entrar con la cartera sin quitar en la cocina.

- Mamá, ¿Qué hay de comer?

- Arró de fantassía - y mi medre se reía.

Es que los de Chershire somos muchos. Podía ser la primera o la décima que preguntaba lo que había de comer. Yo pensaba que mi medre me tomaba el pelo por éso, porque estaba harta de contestarnos a todos.

Pero no era por éso. Es que mi madre se las vió y deseó para alimentarnos y vestirnos a todos, así que nos daba de comer echándole mucho amor a la comida. Que lo de echarle carne estaba más jodido. Así que comimos muchos garbanzos, lentejas, arroces amarillos y todo género que tuviera la virtud de "estirar" bastante. Y estamos muy fuertes y sanos (lo de las cabezas no cuenta).

Esta no es una receta de mi medre. Pero se le parece en la esencia.

Para tres o cuatro personas se necesita:

- Cebolla, ajo y tomate para el sofrito. Media cebolla, un diente de ajo (dos si son chiquitillos) y un tomate hermoso (o media lata de tomate natural troceado).

- Un poco de revuelto congelado de "Gambas, ajetes y trigueros" (qué gran descubrimiento, tú). Recomiendo probarlo, sobre todo los trigueros. El de alcampo suele tener los espárragos duros y tardan mucho en cocer, pero el de mercadona está muy bien.

- Judías verdes congeladas, si quieres la fideuá más fresca. Pimiento rojo, fresco o en lata. También es opcional.

- Una lata de almejas al natural.

- Aceite de oliva (sagrao).

- Un sobre de paellero "Carmencita".

- Amor y una pizca de sal.

Er sofrito: ese gran inicio que merece un post en sí.

Busca un recipiente más o menos plano: sartén grande o incluso olla de barro (alerta con el cálculo de temperatura en el segundo caso: el barro guarda el calor y una vez bajas o quitas el fuego tarda en enfriarse más. Si estás quemando algo en olla de barro, o añades algo frío y remueves rápido... o lo terminas de quemar tranquilamente).

Trocea la cebolla y el ajo bien menudito y ponlo a pochar en algo menos de medio dedo de aceite. El fuego ha de ser suficientemente lento para que no se tuesten los ajos ni la cebolla, amargando el sofrito. Después de que la cebolla esté transparente, se añade el tomate troceado o la media lata. Ahí hay que subir el fuego, para que sofría (y no recueza, que no es lo mismo). Para éso el aceite ha de ser suficiente, si no el agua del tomate gana al aceite y la fritura se convierte en cocción. Y el sabor de todo el plato cambia, palabrita del niño jesús.

Al tomate se le puede añadir la sal entonces. Remover frecuentemente con la cuchara de palo, para que no se pegue en la base. Pruébalo: si los tomates eran muy muy ácidos puede hacer falta un poco de azúcar para contrarrestar. Según gusto, también se puede espolvorear un poco de hierbas provenzales. Si te gusta también puedes poner pimiento rojo troceado, fresco o de latita. Y si no te da miedo, atrévete con el punto "aloporpoco" de mi medre. Que es cuando el tomate se carameliza sin quemarse, y le da un puntazo. Pero es "a lo por poco no se me quema", así que cuidao.

La base tras el sofrito.

Lo que viene siendo la parte de echarle "el género". Aquí la gente con poder adquisitivo añade los centollos y las langostas, pero nosotros vamos a añadir dos puñados (o un plato hondo) de gambas, ajetes y trigueros. Para que sofrían. Y si queremos, otro puñado de judías verdes de las redonditas. Y a fuego medio y con la cuchara de palo, lo vamos removiendo para que sofría. Hay que jugar con el fuego según los congelados suelten más o menos agua... La idea es que siga sofriendo mejor que recociendo. Como la verdura suele tardar más, se pueden apartar las gambillas y dejarlas para echarlas lo último (si no, obtenemos lo que se conoce por microgambas, y no resaltan más que un fideo encima del tenedor). Cuando la verdura está sofrita se puede añadir la lata de almejas o berberechos con su jugo, directamente en la sartén. Y el sobre de paellero de "Carmencita", no necesariamente entero. Remueves el fondo un par de minutos y subiendo el fuego al máximo se puede añadir el agua, que cubra generosamente el contenido.

Er desenlace.

Cuando hierba un poco y el agua trabe con el fondo (que sea caldo y no agua caliente con cosas), probar y rectificar de sal. Entonces se pueden añadir las gambillas reservadas y la pasta de fideuá. El cálculo de pasta es de unos cien gramos por persona, pero depende de la marca de la pasta, del agua, del cacharro... Yo prefiero usar la pasta gallo. La diferencia de precio es de céntimos, pero en la cocción cambia muchísimo (queda más al dente... otras pasan de duras a fofas en un momento y no toman el sabor del caldo igual). Yo el cálculo de la cantidad lo hago al echar la fideuá en el agua. Has de remover con el género, y una vez extendida en la sartén u olla, ha de quedar algo menos de medio dedo de caldo por encima. No obstante, lo suyo es probar la pasta cuando la veamos enblanquecer, como cocida, y cuando notemos el punto al dente (o un poco duro si es olla de barro) cortar el fuego. En cinco minutos de reposo se termina de hacer sin pasarse. Más vale comerlo enseguida y meloso, que esperar a que pierda el agua y comer un emplasto...

Este plato admite variantes sencillas: con arroz en lugar de fideuá, con un revuelto de sopa de marisco (de esas bandejitas que llevan calamares, cuatro almejas y gambas arroceras), con una lata de calamares en su tinta para hacer un arroz o fideuá negros... y el coste no sube de 4 o 5 euros por persona como mucho.

Hale, a la mesa. Que se enfría leches, y el Zagloso se enfada.

4 comentarios:

Náufrago en tierra firme dijo...

Eso del "Arró fanrassía" me recuerda mucho al famoso arroz de mi madre "con lo que haiga"...que consiste básicamente en eso, en un arrocito con lo que haya en la nevera...pueden ser pimientos y verduritas varias (el día que mi madre limpia el cajón de la verdura, aquí no se tira ni un recorte, oiga), salchichas y cebolla (esos sobres de frankfurt a medio comer, fuera), gambitas y trigueros (los famosos sobres del Mercadona que decís)...Vamos, que cuando entras en casa de mis padres y huele a arroz, nunca sabes lo que te vas a encontrar.
:P

Chirly dijo...

Olé por esa fideuá y olé por Míster Hacendado¡

Perlita de Huelga dijo...

Nena, tengo invitados en casa y hoy toca arroz de fantasía. con gambas y sepia de verdad, que hoy tiramos la casa por la ventana!

Gato dijo...

Hala Perli, que no se puede contar contigo...!! Sepia, como los ricos!!!

Naufrago, las madres son sabias. Hay que echar mano de ellas...

Chirli, y Ángela Auchaning también.